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HISTORIAS DE MI FAMILIA

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Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160101. Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 1:

 Cristobal Ortega y Paca Merino, mis abuelos maternos, con sus hijos en el patio central de su casa en la calle Almaraz en torno a 1930.

  De pie de izquierda a derecha, mi madre y sus hermanas y hermanos María, Antonio, Enriqueta, Paca, Cristóbal y Juan. En medio la chacha Tomasa.

- Carmen Ortega Aranda Preciosa!!!!











Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160102.Cabra en el Recuerdo.

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 2:

  Esta otra también de la familia Ortega Merino con casi todos sus integrantes ya casados y primeros nietos, en torno a finales de los cuarenta, y en el mismo patio.

  De izquierda a derecha, en la fila superior: Cristóbal Ortega Merino (médico), Balbino Povedano Ortega (afamado médico en Cordoba), María Ortega y su marido Pedro Gómez de Aranda, Eugenia Ortega y Carlos Garrido Moreno (con mi hermano Paco), Juan Ortega todavía soltero (casaría con Teresa Aranda Rendón) Paca Ortega con su marido Agustín Pérez-Aranda y sus hijos Guillermo y Paqui. Sentados Balbino Povedano (médico reconocidísimo en Priego y sus aldeas) y su esposa Enriqueta Ortega, mis abuelos Paca Merino Merino y Cristobal Ortega Priego (oriundos de Nueva Carteya), María Vergara Navas (de Doña Mencía) y su esposo Antonio Ortega con mi hermano Carlos. En la fila inferior: Cristóbal Ortega Vergara, Manoli y Pacurra Povedano OContinuará...

- Francisca Rueda Gran,. Familia. Bonita. Foto.,. Foto. Para. El. Recuerdo,

- Carmen Garcia Valdecasas Una fotografía preciosa. Una extraordinaria y gran familia. Muchas gracias por compartir.

- Manuel Escudero Conozco y recuerdo a muchos. Gracias por compartir.

- Sisa Piedra Ruiz Oh qué lindos

- Rosi Garcia Bonita foto

- Juan Granados Jurado Este hombre tiene una calle dedicada en Priego, Balvino Povedano.

- Mari Carmen Reyes Peña Bonita foto familiar.

- Manuel Gomez Camacho Bonita foto de la familia de tu padre y de tu madre Pepe, todavía no habían nacido muchos de tus herman@s

- Pepa Merino Leon Que linda foto con con la familias me encanta

- Rafael López Valle Preciosa foto de familia

- Francisco Bonilla Laguna Magnifica familia.

- Elvira Padillo Ruiz Carlos y Eu, fueron mis compañeros de curso en el Instituto

- Lola Pérez Aranda Que preciosa foto que familia tan hermosa. Entre ellos mo hermano Agustín mi cuñada y dos sobrinos

- Ini Diaz Una foto muy entrañable!!!

- Maricarmen Cosano Montes Bonita familia 2

- Mariasierra Vilchez Qué hermosos recuerdos!!!! ¡Que buena familia y cariñosos!!!

- Ana Maria Perez Castillo Que bonito el poder tener una foto asi

- Cristobal Ortega Aranda Pepe Garrido Ortega la prima Manoli Povedano, con buena memoria recuerda el nombre de la perrilla que era “saeta”. Si la foto sería quizá de mediados de los 40, pues mis padres se casaron en agosto de 1948

- Pepe Garrido Ortega Es verdad, primo. La prima Manoli tiene una excelente memoria, como pude recordar la última vez que estuve con ella, hará dos años. Le recordaba entonces cuando me llevaba al Paseo de carabina con ella y el que entonces era su novio Pepe Raya, yo con cinco o seis añitos. Démosle desde aquí a Manoli Povedano las gracias por habernos proporcionado estas dos magníficas fotografías, al igual que le envío desde Cabra en el recuerdo un beso muy fuerte.

- Carmen Ortega Aranda La foto, preciosa!!!!!

- Pilar Cubero Gomez de Aranda Qué maravilla de foto,

- Carmen Garcia Valdecasas Que alegría da ver una familia así.!!!!

-











Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160103. Cabra en el Recuerdo.-

 Pepe Garrido Ortega.- De historias de mi familia 3:

  Aquí mis abuelos maternos de nuevo con sus hijos, en una fotografía iluminada (coloreada a mano) tomada el mismo día que otra anterior y en el mismo patio de su casa en Cabra, en torno a 1930.

- Pedro Cubero Pepe, una foto muy bonita y entrañable. Me imagino que la tía María es la primera por la izquierda.

- Pepe Garrido Ortega Pedro Cubero así es. Su hermana Enriqueta era mayor pero al ser la tía María más alta se colocó delante para formar la fila en escalera de todos ellos.

- Lola Pérez Aranda La segunda de la. Izquierda es mi cuñada Paca

- Lola Pérez Aranda Me encantan estas fotos. Que Disfruto al verlas. GRACIAS Pepe

- Pepe Garrido Ortega Lola Pérez Aranda gracias Lola. Pues habrá más, cada día una

- Pepa Merino Leon Preciosa foto

- Juan Granados Jurado Bonita foto y bonita familia Pepe Garrido. 1

- Pepe Garrido Ortega Juan Granados Jurado Muchas gracias, Juan

- Sierri Márquez Pérez Qué hermosa fotografía!!!

- Carmen Garcia Valdecasas Preciosa fotografía e interesante. Que trajes peinados y adornos tan bonitos llevan la jóvenes . Gracias por compartir.











Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160104. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 4:

  Mi abuelo Cristóbal con su primer coche en el patio del molino que tenía en su pueblo, Nueva Carteya.
 Él se vino a vivir a Cabra a raíz de un grave conflicto social surgido por la subida del pan un real, siendo él alcalde. Contaba mi madre, que el pueblo se alborotó y los municipales tuvieron que ir a la escuela a por ella y sus hermanas para protegerlas de los manifestantes. Total, que después de aquello mi abuelo les dijo a sus paisanos "ahí os quedáis", y se vino a vivir a Cabra. Desde luego, siempre se sintió muy carteyano.

- Carmen Garcia Valdecasas: Muy interesante fotografía.
  La evolución que han tenido los coches, como todo,hasta ahora. Ese es más antiguo que los que yo conocí. Recuerdo coches algo parecidos con los amortiguadores si lo tenían eran terribles. Y los saltos que daban cuando en terreno era algo más duro.
  Ya en aquellos momentos que se veía de todo hasta creo que coches americanos si no me equivoco. Pocos accidentes hubo,desde luego no se podía correr mucho. Lo que si era cómoda la altura y el estribo.
  El arrancarlo era a veces terrible con la manivela. El coche que se ve es un auténtico tesoro de aquellos tiempos ,mires por donde lo mires.
  Muchas gracias Pepe Garrido Ortega por compartir esa fotografía y por todo lo que nos dices sobre esos momentos .












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160105. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 5:

  Al llegar a Cabra mi abuelo Cristóbal compró una casa a dos señoras, ya muy mayores, a las que llamaban las Galianas. Seguramente éstas serían las últimas descendientes en Cabra de la familia de los Alcalá Galiano.

 La casa era enorme, muy antigua, bastante abandonada, hacía esquina entre las calles Almaraz y Pepita Jiménez. Mi abuelo acometió importantes mejoras en ella, entre otras colocó preciosos azulejos en el patio central y en todas las habitaciones de la planta baja, excepto en la cocina y despensas.

  Aquí mis abuelos con sus hijos y otros familiares en el patio central, todavía sin reformar. Acababan de llegar de Nueva Carteya.

 Datación estimada: 1920.

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega, ¿de qué años pueden ser estas fotos?

- Pepe Garrido Ortega Por la edad que representan los niños entiendo que en torno a 1920. A no ser que algún familiar mío pueda ajustar más la fecha

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega gracias.

- Pepe Garrido Ortega Para servir a Dios y a usted

- Cristobal Ortega Aranda Pepe Garrido Ortega , mi padre nació el 24 de junio de 1922 y nació en Cabra

- Antonia Estevez De los 50 parese madremia

- Antonia Estevez aquí no habia nada de nada ni televisión solo a radio si es que aún estaba

- Ana Maria Perez Castillo Que historias

- Rafael Luna Leiva Comentario de Francisco Salamanca Moreno: "En esta casa vivió Dionisio Alcalá - Galiano durante el tiempo que fue estudiante del Aguilar y Eslava. Las Galianas, como se les conocía, tenían varias propiedades en la calle Marqués de Cabra... Y en la calle Cervantes de donde pasaron a unas dependencias de las monjas agustinas, etc. etc. etc.".

- Francisco Luque Mi suegra me contaba algunas cosas de las Galianas












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160106. Cabra en el Recuerdo.

  Pepe Garrido Ortega:

  "De historias de mi familia 6: Mis abuelos Paca Merino y Cristóbal Ortega, y sus hijos de pequeñines (Antonio, Eugenia, Cristóbal, Enriqueta y María; todavía faltaban los más pequeños, Paca y Juan) cuando todavía vivían en Nueva Carteya.

 Carteya era una población de muy reciente fundación, fundada en 1822 por el cura de Baena don Diego Carro, bajo el nombre de Aldea de San Juan. Sus primeros habitantes, dedicados en su mayoría a la agricultura, eran braceros o labradores muy modestos, logrando algunos a base de trabajo y tesón formar un capitalito, cual fue el caso de mis bisabuelos.

  Mi madre, aunque solamente vivió en Carteya su primera infancia, siempre se sintió muy orgullosa de su pueblo. Muchas veces la escuchamos entonar una cancioncilla aprendida de pequeña y que decía algo así:

“Carteya ya no es Carteya
que es una gran capital
con sus carreteras nuevas
y sus calles arrecifás…”


Maria Luisa Luna Murillo La familia paterna de mi padre también era Carteyana.

- Rafael Luna Leiva Maria Luisa Luna Murillo mi familia paterna también. Por cierto, nos apellidamos Luna

- Cristobal Ortega Aranda Maria Luisa Luna Murillo nuestro bisabuelo era Cristóbal Ortega Luna, de Nueva Carteya

- Rafael Luna Leiva Cristobal Ortega Aranda al final, todos parientes

- Maria Luisa Luna Murillo Cristobal Ortega Aranda mi tatarabuelo se llamaba Juan Tapia Ortega, su hija Mercedes se casó con Juan Luna, mis bisabuelos. Uno de sus hijos, Antonio Luna Tapia fué mi abuelo y se casó en segundas nupcias con mi abuela Luisa Simeon Baños que procedía de Córdoba y fué matrona en Nueva Carteya y posteriormente en Cabra. Y mi padre, Antonio Luna Simeón, su único hijo se casó con Aurora Murillo Guzmán.

- Rosario Luque Osuna Pues mi bisabuela paterna, Trinidad García y abuelo Adolfo Luque También carteyanos, propietarios de la huerta que tenía una alberca muy grande, en la que se bañaban las mujeres en la mañana y los hombres en la tarde.

- Ana Maria Perez Castillo Bonita historia












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160107. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 7:

  Aquí uno de mis bisabuelos paternos, Francisco Moreno Ruiz, nacido en la villa de Doña Mencía en 1816. Era hijo de Diego Moreno Cubero y de Francisca Ruiz Ortiz. Cursó estudios en el Colegio de Humanidades de Cabra.
 Desde joven se sintió atraído por la política, militando en las filas de los progresistas. A los veinticinco años, como se recoge en el documento de la derecha, el general Pedro Méndez Vigo reconoció “su balor (sic) y patriótico comportamiento en las operaciones que tubieron (sic) lugar en las Andalucías en septiembre ultimo”. A la vez que lo propuso para ser nombrado “Cavallero (sic) de Isabel la Católica en justo premio de los eminentes serbicios (sic) que ha prestado a la causa de la libertad, en los críticos momentos en que los fautores de la tiranía conspiraban para arrebatarnos tan precioso derecho” (Madrid, 19 de enero de 1841).
  Siguiendo la estela de tantos otros jóvenes progresistas, y de la mano de su íntimo amigo Martín Belda, bien pronto derivó hacia el moderantismo conservador.
  Por muchos años se mantuvo como alcalde de Doña Mencía y verdadero amo del pueblo. Nada importante se hacía allí sin su consentimiento. De temperamento impulsivo, la naturaleza le dotó de clara inteligencia y don de gentes. Trabajador incansable, acrecentó de manera considerable las tierras de labor que le dejaron sus padres. Como bodeguero, como agricultor y ganadero, procuró siempre estar al día en los avances de las técnicas enológicas y agropecuarias. Seguiremos hablando de él.

- Rafael Luna Leiva Sin duda, "Morenito", unos de nuestros personajes más relevantes de Cabra del siglo XIX. Esperamos con impaciencia la siguiente entrega Pepe Garrido Ortega

- Francisco Vazquez Moreno También fue nuestro bisabuelo. Se casó en segundas nupcias a los 66 con una paisana suya: doña Josefa Navas Vargas de doña mencia muy joven, tuvo 4 hijos: Josefa, Paca, francisco y Maria años y murió a los 91 años.

- Pepe Garrido Ortega Paco Vazquez Moreno, nuestra bisabuela Josefa Navas tenía 16 años cuando se casó y era sobrina de su marido. Atento al aparato, hablaré más de FMR y subiré lindas fotos en las que también se ve a tus abuelos y a tu madre de jovencita.

- Rosi Garcia Una pregunta, porque detrás de las faltas lo de (sic)?

- Rafael Luna Leiva Rosi Garcia (sic) quiere decir que así es como viene escrito textualmente.

- Rosi Garcia Rafael Luna Leiva, vale, gracias.

- Antonio Luque Ramírez Rosi Garcia Viene de la frase latina “ sic erat scriptum “ así fue escrito. (San Google)

- Rosi Garcia Antonio Luque Ramírez, gracias!

- Pepe Garrido Ortega De este documento me llama la atención la expresión "las Andalucías". No recuerdo haber visto nunca llamar así a Andalucía

- Juan Granados Jurado Pepe Garrido Ortega esto me recuerda la expresión "las Españas", aunque en éste caso alomejor era por la presencia de España en tantas partes del mundo.

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega es posible que haga alusión a las dos Andalucías militares (Oriental y Occidental), vigente hasta finales del XX.












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160108. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 8:

  Dos personajes históricos tenían a Francisco Moreno Ruiz -Morenito-, entre sus mejores amigos: don Juan Valera y Alcalá Galiano, y don Martín Belda, I Marqués de Cabra.
  (Aclaración de partida, a Francisco Moreno Ruiz su familia y sus amigos siempre le llamaron Morenito, por apellidarse Moreno y ser bajito de estatura; también le llamaron Morenito, pero en sentido peyorativo, sus enemigos, que también los tuvo, y muchos).
  Hablemos hoy de Belda y Morenito.
  Martín Belda, nacido en Cabra en el seno de una familia de modestos comerciantes, marchó muy joven a Madrid, con una mano delante y otra detrás. En principio tuvo el apoyo de un Valera y de un Alcalá Galiano que le proporcionaron unos empleos modestos como escribiente, primero en un despacho de abogados y luego en el Ministerio de Marina. Bien pronto, por su don de gentes y su disposición a servir a cualquiera que estuviera bien situado, el joven Belda se lanzó a la política y se presentó a las elecciones al Congreso de los Diputados de 1847 por el distrito electoral de Cabra. Y para conseguir su propósito recabó la ayuda de personajes influyentes del distrito (Cabra, Baena, Castro del Río, Doña Mencía y Zuheros). Obtuvo la ayuda decisiva para vencer en las elecciones, según afirmaba el propio Belda, de Morenito.
  A partir de entonces se estableció entre ellos una estrecha amistad, llegando a formar entre ambos, uno desde Madrid y el otro desde Doña Mencía, una pareja imbatible en todas las demás elecciones a Diputados del reinado de Isabel II. Precisamente, mi libro “Martín Belda. Un político al servicio de Isabel II” (2004) lo dediqué al estudio de esta relación política entre Belda y Moreno Ruiz. Ojo, no he venido aquí a hablar de mi libro como Umblal, por suerte o por desgracia la edición que hizo la Universidad de Córdoba de ese libro hace mucho tiempo que se agotó.
  En resumen: el diputado por el distrito de Cabra depositaba su plena confianza en el Alcalde de Doña Mencía, para que coordinara a sus partidarios políticos del Sur de la Provincia de Córdoba. Cuando había elecciones, Morenito apañaba los votos para Belda, y éste, a su vez, desde el Congreso apañaba el suculento turrón demandado por sus insaciables partidarios de Cabra y Doña Mencía. En el sistema político del caciquismo de la segunda mitad del siglo XIX se llamaba repartir el turrón a la concesión de fondos para los ayuntamientos, colocaciones en la Administración, de maestros, médicos de los ayuntamientos, en los institutos y universidades, en el Ejército y hasta en la Iglesia, nombramientos de jueces y fiscales en juzgados claves (obviamente, algo muy importante), rebajas de impuestos a los mayores contribuyentes, etc.
  En definitiva, Morenito se encargaba de repartir las prebendas entre los que “se portaban bien” y le entregaban su voto en los comicios. De esta manera, en las elecciones Belda y Morenito resultaban invencibles. En términos políticos, está claro, Morenito era un cacique, y no un bandolero como propagó la leyenda urdida por Julián Zugasti. Pero esto lo aclararemos más adelante.
  También entre ambos hicieron jugosos negocios, entre otros adquirir a buen precio tierras de los herederos de la Casa de Altamira (condes de Cabra, duques de Baena, duques de Sessa y otros títulos).

- Jose Carlos Ortiz

- Rafael Luna Leiva Excelente comentario, Pepe Garrido Ortega. Tan poderosa pareja dio lugar a que Juan Valera jamás saliera de diputado por el distrito de Cabra. Por otro lado, creía erróneamente que Martín Belda no consiguió para Morenito con lo más suculento del duque de Sessa. Por cierto, cerca de Juan de Escama aún existe el cortijo El Duque, no sé si está relacionado con este asunto de las tierras de los Sessa en nuestro término municipal.

- Pepe Garrido Ortega Rafael Luna Leiva gracias, Rafael. Morenito se hizo con tierras de la casa de Altamira cuando ya se había disgregado entre varios miembros de esa casa, que como bien apuntas no pudo hacerse con la administración de los bienes del conde de Cabra. Iremos hablando de esos temas que apuntas. Poquito a poco

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega gracias.

- Manuel Gomez Camacho Rafael Luna Leiva Las tierras del Cortijo El Duque lindan con las de Juan de Escama, la carretera de Doña Mencía es la linde, Pepe Garrido Ortega

- Juan Granados Jurado Muchas gracias Pepe.

- Rafael Luna Leiva El hecho de que el libro de Pepe Garrido Ortega esté agotado no quita que lo podamos compartir Quien desee echarle un vistazo, puedo prestarlo.

- Pepe Garrido Ortega Rafael Luna Leiva además en la Biblioteca de Cabra deben contar con varios ejemplares

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega exacto.

- Amparo Romero Marquez Pepe Garrido Ortega lo buscaré en la biblioteca. Gracias por la información, siempre había oído que Morenito de Cabra había sido un bandolero y ahora sé no era cierto,que se trataba de un bulo mal intencionado

- Carmen Garcia Valdecasas Muy interesante todo lo que cuentas Pepe Garrido Ortega. Nos estas dando a conocer como se actuaba en aquella época. Y la gran importancia de una historia tan bien documentada y tan directa.

- Miguel Angel Lubian Comentario muy interesante Pepe Garrido. se puede bajar por internet?. Un saludo

- Pepe Garrido Ortega Sí Miguel Angel, se puede copiar desde aquí mismo.

- Francisco Bonilla Laguna Muy interesante e ilustrativo comentario,gracias.

- Lola Pérez Aranda Muy interesante. Gracias












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160109. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 9:

  Bien conocido es que Juan Valera nació en Cabra, aunque a veces se olvida que el futuro escritor pasó su infancia entre Cabra y Doña Mencía, ya que sus padres tenían casa abierta en las dos localidades. Por un lado, la madre prefería residir en Cabra, al ser una población con más vida social que Doña Mencía, mientras que el padre necesitaba estar cerca de sus tierras de labor, especialmente en épocas de recolección. Así, Valera siempre se sintió tan menciano como cabreño, o tan de Cabra como de Doña Mencía, que no se me ofendan mis paisanos. Tanto es así que en ninguna de las miles de cartas que Valera escribió a lo largo de su vida, nunca encontraremos la expresión “mi pueblo” si se refiere a Cabra o a Doña Mencía. En esas ocasiones siempre decía “mi lugar”, cuando aludía a cualquiera de los dos pueblos, o a ambos a la vez. Mi lugar.
  Entre Francisco Moreno Ruiz y Juan Valera existía cierta diferencia de edad, Morenito le sacaba ocho años. Por tanto, aunque Morenito conocería a Juanito Valera desde su niñez, no surgiría una estrecha amistad entre ambos hasta el fallecimiento del Marqués de la Paniega, el padre del escritor, en 1858. Por entonces, en una carta que le envío Valera a Morenito, le decía: “Espero, como la mejor herencia de mi padre, que he de poder contar con los sinceros y leales amigos que tenia, entre los cuales es usted el primero» (Madrid, 21 de abril de 1859). Ciertamente, Morenito había sido amigo entrañable de don José Valera y Viaña, y como albacea testamentario del mismo asesoró a Juan Valera en los asuntos relacionados con la herencia paterna, forjándose entre ambos, desde entonces, una estrechísima amistad mantenida hasta los últimos días de don Juan. Las cartas enviadas por éste a Moreno forman el epistolario valeriano más extenso entre todos los publicados.
  Pero de esto hablaremos otro día.

- Rafael Luna Leiva Cada vez más interesante, Pepe Garrido Ortega. Eso sí, nos dejas con la miel en los labios

- Manuel Escudero Pepe, que te gustan las novelas por entregas…

- Rafael López Valle Morenito, creo.. ayudo a Valera en muchas ocasiones económicamente hablando

- Pepe Garrido Ortega Rafael López Valle efectivamente, dices bien. Pero no se me adelante que de eso ya hablaremos

- Pepe Garrido Ortega Amigos Rafael y Manolo, si algo he aprendido aquí es que hay que evitar las retahilas y contar las cosas con cuenta gotas, y con todo hay quien se indigesta con tanta chachara.

- Manuel Escudero Ortega será a los que no le guste y disfruten de la Historia de Cabra y de sus “gentes”. A mi me apasiona.

- Carmen Garcia Valdecasas Muy interesante Pepe Garrido Ortega. Antes no sabía bien quien era exactamente Francisco Moreno Ruiz .No podía imaginarme que fuera Morenito . Muchas gracias por la información tan buena que nos estas dando.

- Juan Granados Jurado Muchas gracias Pepe, muy interesante todo lo relacionado con la historia de nuestra ciudad y de su gente.

- Francisco Bonilla Laguna Interesante relato,gracias por compartir.

- Marivi Ruiz de Prado Interesante relato. Aquí estaré esperando las siguientes entregas. Gracias

- Margarita Carrillo Muy interesante y didáctico. Gracias por compartir

- Lola Pérez Aranda Gracias por tan interesantes datos...

- Ángeles Mo Ji Gracias x compartir

- Maria Dolores Meroño Roldán Gracias a Pepe Garrido Ortega he sabido que Morenito nunca fue bandolero como yo había oido.

- Luisa Arana Rueda Qué acertado lo de heredar los amigos de tus padres. Me ha gustado mucho y creo que es algo que heredas automáticamente si existía una amistad auténtica. Muchas gracias por estos minutos de lectura tan, tan, interesante e instructiva












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160110. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 10:
  Doy a conocer hoy aquí dos distinciones más otorgadas a Francisco Moreno Ruiz, y cuyos documentos acreditativos hago públicos por primera vez.
  El 30 de agosto de 1853, Isabel II concedió a Francisco Moreno el apreciado título de Comendador de la Orden de Carlos III, y cuya cruz luce en el retrato que ya hemos publicado. Sin duda, Martín Belda fue partícipe de dicha gracia. A la izquierda tenéis el documento en que se certificación tal distinción. En julio de 1855 se desencadenó una terrible epidemia de cólera en Doña Mencía, a consecuencia de la cual numerosos mencianos acabaron en la sepultura. En septiembre del mismo año, una vez pasada la epidemia, el Ayuntamiento de Doña Mencía acordó lo siguiente:
  “Atendiendo al activo celo que ha demostrado en tan aflictiva crisis los señores de la Junta de Salud Pública, se les da las más expresivas gracias en nombre de este vecindario y con especialidad a su digno Presidente Don Francisco Moreno Ruiz, Diputado provincial por este partido, quien en obsequio de la humanidad durante la época que este pueblo ha sufrido tan desoladora enfermedad, ha sido infatigable en proporcionar cuantos medios han sido posibles al intento”. Igualmente se acordó: “fijar en la pared sobre la puerta principal de su casa morada una inscripción que así lo acredite” (Estas noticias las pude obtener de mis investigaciones en el Archivo Municipal de Doña Mencía).
  También a petición del Ayuntamiento de Doña Mencía se solicitó por entonces la Cruz de Beneficencia para don Francisco Moreno Ruiz, dada su entrega para atajar el cólera de 1855. Gracia concedida por S. M. la Reina Isabel II el 26 de marzo de 1858, y cuyo título (situado a la derecha) firmaba el Ministro de la Gobernación Ventura Díaz.

- Juan Maria Rojano Garrido Buenas , eres una enciclopedia viviente…. Todo muy interesante .A ver si nos vemos pronto. Un saludo

- Manuel Castro Casas Como persona interesada y estudioso de esa etapa histórica local y comarcal, (desde la modestia y el respeto a los profesionales historiadores), no puedo más que agradecer desde este foro, al amigo Pepe Garrido Ortega, la puesta en valor de los documentos tan interesantes que nos comparte, así como sus comentarios, que resumidos en pocas líneas (por el medio en el que estamos, Facebook), demuestra un profundo conocimiento de la época histórica y del personaje concreto (y su entorno) objeto de estudio.
  Por lo que Pepe Garrido Ortega, te animo a seguir con el hilo, e incluso a explayarte y entrar más en “detalles” - que seguro que eres conocedor de ellos- aunque con ello tengas que aumentar tus “parrafadas”.
  Pido perdón por esta mía...

-












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160111. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 11:

  Tras fallecer mi abuela Paca Moreno Navas (1883-1978), cuando se estaba haciendo inventario de los muebles y enseres que había en su preciosa casa de la calle Alonso Uclés, un buen día, Antonio, la persona que en los últimos años había ayudado a mi abuela en las tareas de la casa, nos llamó a mi hermano Cristóbal y a mí para que viéramos el contenido de una arqueta de madera que había aparecido llena de viejos documentos. Antonio sabiendo de nuestra afición por los “papeles antiguos” no quería tirar aquellos papelotes antes de que nosotros los viéramos. La arqueta de la que hablo es la que se puede apreciar aquí y que con muchísimo cariño conservo en mi biblioteca.

  En cuanto que nosotros abrimos la arqueta comprobamos sorprendidísimos que estaba repleta de cartas enviadas por Martín Belda a nuestro bisabuelo Francisco Moreno Ruiz, y en menor medida de cartas procedentes de otros remitentes coetáneos de Belda. Hasta entonces nadie nos había hablado de esas cartas. Comentado con mi padre el hallazgo de las mismas, nos dijo que recordaba haberlas ojeado de joven, pero que después las había olvidado. Resultó que las cartas que tan celosamente había conservado Morenito, después su viuda y después su hija Paca, nadie de nuestra familia las recordaba o sabía de su existencia.

  El caso es que mi bisabuelo conservó dos importantes colecciones de cartas que le habían enviado dos personajes históricos, don Juan Valera y don Martín Belda. Y que tras morir su viuda en 1937 las de Valera habían pasado a su hija Pepa, casada con Luis Pallarés Delsors, y las de Belda a su hija Paca, viuda ya de mi abuelo Carlos Garrido Lozano. Siendo Valera un personaje de mayor trascendencia histórica que Belda, y dado también el valor literario de sus cartas, toda la familia sí supo siempre de la existencia de las cartas de Valera. Hablaremos otro día de ellas.

  Volvamos a donde nos quedamos cuando entre mi hermano Cristóbal y yo nos pusimos “como fieras” a devorar una tras otra aquellas cartas que habían resucitado de la arqueta de madera en que habían quedado sepultadas durante cincuenta años. Conforme más cartas leíamos más nos convencíamos de la importancia para la historia de aquella colección de cartas. Nosotros que como muchos de Cabra habíamos oído hablar a nuestros mayores de las supuestas relaciones amorosas de Isabel II con Belda, al menos eso se pensaba en Cabra, seguíamos y seguíamos leyendo cartas confiados en encontrar en alguna de ellas que Belda contara a su íntimo amigo algún detalle por el que pudiéramos colegir que, efectivamente, Belda había sido amante de Isabel II. Y… ¿qué encontramos? Sorpresa. Encontramos una carta en que don Martín contaba a don Francisco que… Bueno, esto se está convirtiendo en una retahíla más de las que se me acusa prodigar en demasía. Así que esta historia la remataré mañana publicando aquí dicha carta, y que quienes me habéis seguido hasta aquí podáis juzgar su contenido.

- Maria Victoria Garrido Ortega Me acuerdo perfectamente...un día te callaste, viendo la cara de papá. Tengo ganas de escuchar el final de la historia.... 3

- Pilar Cubero Gomez de Aranda ...esperando..

- Pili Mo Pepe Garrido Ortega, eres terrible!! Eso no se hace! Bromas aparte, mil gracias por tus relatos históricos! Son un disfrute. Deseando estoy que llegue mañana!

- Pepe Moreno Álvarez No dejes para mañana, lo que puedas contar hoy ...

- Pepe Garrido Ortega Amigo Pepe Moreno Álvarez ¿no querrás una exclusiva para Sálvame? Aunque si sale vamos a medias ¿eh?

- Pepe Garrido Ortega A todos, muchas gracias por vuestra atención a mis historias. La verdad es que la próxima historia, aunque quiero sacarla mañana, no sé si podré. Por problemas de producción, digamos, tengo que escanear el contenido de dicha carta. Aunque confío en que sí, mañana saldrá

- Pili Mo Pepe Garrido Ortega vaaale, podemos esperar hasta pasado mañaaana

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega , el relato cada vez más interesante. Esto engancha 😉😉. Muchas gracias.

- Alejandro Garcia Rosal Grande Pepe!

- Antonio Jesús Pérez Durán Desde luego, esto engancha!!

- Carmen Garcia Valdecasas Muchas gracias Pepe por todo lo que nos estas aportando , de esos momentos de la historia. Además, narrados por ti ,gran historiador con esa cualidades tan especiales y extraordinarias en todo lo que cuentas y describes . Demostrando además una generosidad muy grande.

- Margarita Moral Ruiz Oh! Muy interesante! Gracias por compartir.

- Rosi Garcia Cada vez más interesante!! Buenos días

- Rosario Luque Osuna A mí tbien me tiene engancha, gracias.

- Antonio Gomez Moyano He de confesar que al principio no lo ley más que por encima pero ahora estoy esperando más

- Marisa Muñoz Jimenez Cuantos secretos guarda Cabra me encanta

- Lourdes Osuna Yo tb estoy enganchadisima

- Jose Egea Granados Esto está genial!!!! Siguiente capítulo?

- Pepe Garrido Ortega Jose Egea Granados espero que esta tarde

- Antonia Porras Muy interesante

- Carmelo Javier Estamos enganchados!

- Manuel Gomez Camacho Magníficas historias del contenido de la antigua arca de tu abuela Pepe, recuerdo el desmontaje de los muebles que le tocaron a tu tía Victoria y los viajes que dimos hasta Juan de Escama.

- Rita Aguilar Osuna Queremos más!! Muchas gracias por compartirlo con nosotros!!

- Rafael López Valle Deben de ser interesante las cartas de Valera de sus andaduras por el mundo, deseosos estamos leer la próxima publicación

- Rafi Corpas Reyes Interesantes documentos de personas de aquella época.. Me ha llamado la atención que mantengas la arqueta donde estaban guardadas pues me gustan mucho las cajitas, baúles o continentes donde se guardaran cosas para el recuerdo... Pues esa que tú tienes Pepe, me ha llamado la curiosidad.. Almidón Hoffmann "".., tiene cierto valor de colección de cajas o cajitas de ese producto de principios del siglo XX.... Es solamente una aportación, espero tu siguiente entrega de relato.

- Pepe Moreno Álvarez (M) ANTIGUA CAJA DE MADERA PRINCIPIO S. XX PUBLICIDAD ALMIDON HOFFMANN GATOS ESTAMPADOS AL TODOCOLECCION.NET

- Pepe Moreno Álvarez Fábricas de almidón Hoffmann

- Rafi Corpas Reyes Pepe Moreno Álvarez,,, muy bonitas verdad?

- Pepe Garrido Ortega Gracias Pepe Moreno Álvarez exactamente igual es la mía. Gracias

- Pepe Garrido Ortega Lo que no sé es para qué se utilizaba el almidón

- Pili Mo Pepe Garrido Ortega para la ropa, puede ser?

- Pepe Moreno Álvarez Para dar rigidez a las telas.

- Rafi Corpas Reyes Un uso para el baño del bebé...

- Pepe Garrido Ortega Pili Mo sí, yo sé que antes el almidón se utilizaba para la ropa pero una caja tan grande con almidón para la ropa ojú mucha ropa se almidonaría. Pienso si no se utilizaría en algúna labor del camp, no sé

- Rafi Corpas Reyes Pepe Garrido Ortega,,, pues en tiempos de feria para almidonar los volantes de los vestidos de gitana, ya se necesitaba ii.. Es lo qué había para levantar las telas..

- Juan Granados Jurado Esto es cada vez más interesante Pepe, vaya historias que tienes guardadas .

- Jose Mari Castro Valle Pues esperando, esta curiosidad me quedo, gracias por el relato muy explícito, y detallado,

- Mercedes Fernández López Recuerdo esa casa perfectamente

- Marisi Rosa Muñoz Fascinante!!!!

- Rosario Navas Alcantara Que interesante. Una historia y personajes de lo más curioso.. 👍 1

- Paco Ani Borrallo Carvajal Conocí ésa casa y a Antonio creo qué vivía en la calle San Fernando fuimos a hacer un trabajo y recuerdo qué nos invitó a tomar unos vinos dé la bodega qué había en la casa de eso hace más de cincuenta años.

- Sierri Márquez Pérez Muy bonitos recuerdos

- Miguel Angel Lubian Para mi todo es nuevo, y así por partes, voy asimilando mejor la historia y los personajes, y siempre queda ese punto del final, para el comienzo de la siguiente parte, que nos hace quedar esperando un final para mi desconocido. Gracias por el relato, pendiente me quedo de saber mas de esta precioa historia.

- Mari Carmen Borrallo Gutiérrez Esperando

- Francisco Bonilla Laguna Maravilloso relato,quizás alguna carta podría cambiar la historia.

- MCarmen Cañero Ruiz Qué suerte tener la historia de su antepasado toda una joya

- Lourdes Osuna Yo tb estoy enganchada a tus historias Pepe

- Mercedes Fernández López Esas cartas son un auténtico tesoro histórico

- Luisa Arana Rueda Qué interesante.... deseosa de la siguiente entrega

- Antonio Arevalo Morillo ¡¡¡qué intriga!!! Pepe, nos tienes en tensión y expectantes!!!! Un saludo

- Pepe Moreno Álvarez Me da que Belda no entró en el elenco, porque de haber entrado, sería un nueva joya a engarzar en la corona. Aún así, Pepe Garrido Ortega ¿lo dirás antes o después de la finalización del España-Portugal?
  La reina ninfómana, Isabel II de España

- Pepe Garrido Ortega Pepe Moreno Álvarez uy de furbol no sé ná. Ya está publicaddo en mi cuenta, a la espera que Rafael Luna Leiva lo engarce con la suya. Ah, mañana más maera

- Maria Dolores Meroño Roldán Qué buena aportación!Gracias.

- Margarita Carrillo Interesante relato, deseando estoy de la continuación. Gracias

- Jose Maria Martinez Iniesta Muy interesante

- Rosa Ordóñez Chávarri Interesantísimo

- Maria Jose Gonzalez Rodriguez Muy interesante!!

- Inma Arevalo Interesante!!!!

- · 7 h Maria Del Carmen Mari-Carmen Serrano Maravilloso relato












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160112. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 12:

  Aquí doy a conocer una de las cartas enviadas por Martín Belda a Francisco Moreno en julio de 1850, tras escanear el documento original que conservamos en mi familia. Para mayor comodidad de quienes tengan problemas para descifrar la caligrafía de Belda, seguidamente transcribo su contenido, respetando la ortografía de la época. A la vez que formulo algunos comentarios sobre la misma. Dice así:
  Madrid 12 de Julio (1850)
  Querido Frasquito María:
  A las 4 de esta tarde dió á luz S.M. la Reyna un robusto y hermoso Príncipe, pero a los pocos instantes murió dejándonos á todos en el más triste desconsuelo. He tenido en mis manos al Príncipe y he firmado el acta de su nacimiento y muerte como testigo nombrado por el Congreso.
  Tuyo apdo.
  Martín

  Al leer la carta anterior por primera vez, nos hicimos una serie de consideraciones. Belda llegó por primera vez como Diputado al Congreso tras las elecciones de octubre de 1847. Por tanto, en el momento del nacimiento del príncipe citado en la carta de julio de 1850, Belda no llevaba en el Congreso ni tres años. Era por tanto un diputado novel con escasa experiencia. Y por ello nos sorprendía que Martín Belda acudiese al Palacio Real para estar presente en el parto de la Reina, cuando era un diputado de escasa relevancia. Y que incluso dijera a Moreno que “había tenido en sus manos al Príncipe y había firmado el acta de su nacimiento y muerte”. Y aun cuando también añadía que había actuado como testigo del Congreso, creíamos que cabía preguntarse si la presencia de nuestro paisano en el Palacio Real respondía a otras circunstancias que se nos escapaban. ¿Pudo ser Belda el padre de dicho Príncipe? ¿Cuándo se conocieron Isabel II y Martín Belda?
  En torno a 1846, un día en que Isabel II paseaba en carroza, al cruzar la Puerta del Sol, grupos de viandantes lanzaron silbidos y protestas contra la misma Reina, dado el malestar existente por entonces entre las clases populares. A raíz de ello el Gobierno acordó celebrar una función de gala en el Teatro Real, y repartió la mayoría de las entradas entre los funcionarios de los ministerios, a la vez que les aleccionaba a que cuando apareciera Isabel II en su Palco Real, todos al unísono aplaudieran y le vitorearan en señal de desagravio por la afrenta sufrido en la Puerta del Sol. Pues bien, uno de los funcionarios que más aplaudieron y se desgañitaron lanzando vítores a su reina no fue otro que un jovencísimo y apuesto escribiente del Ministerio de Marina, conocido por Martín Belda. Y tanto “se fijó” la jovencísima reina en la apostura de dicho funcionario que dispuso que le invitaran a subir al palco real para conocerle y agradecerle su entusiasmo. Así se contó esta historia en un viejo periódico de Cabra por un coetáneo de Martín Belda, y de ahí nació la historia o leyenda del inicio de la amistad entre Isabel II y Martín Belda.
  Así que, atando hilos, en un principio, y antes de lanzar las campanas al viento, me propuse estudiar a fondo aquellos acontecimientos, recurriendo a la documentación de la época, prensa incluida, para afianzar la hipótesis de partida de si aquel príncipe nacido en julio de 1850 pudiera ser hijo de Martín Belda. Mañana añadiremos una nueva carta, escrita al día siguiente de la de hoy, en la que Belda volvía a incidir en las circunstancias de la muerte de este príncipe, el primero de los hijos de Isabel II. Habrá más madera.

- Pepe Moreno Álvarez S.A.R. el malogrado príncipe de Asturias. Retrato de Fernando de Borbón y Borbón, litografía de Cayetano Palmaroli según pintura de Federico de Madrazo, estampada en la litografía de Julio Donon, Madrid. Londres, British Museum.

- Pepe Garrido Ortega Que bueno, este niño cuando nació?

- Pepe Moreno Álvarez Es el niño que Belda tuvo en sus brazos

- Pepe Moreno Álvarez Fallecido cinco minutos después de nacer el 12 de julio de 1850.

- Pepe Garrido Ortega Uffff ¡que bien! pues mañana daré más detalles y utilizaré también esta afoto, con tu permiso

- Pepe Garrido Ortega Aunque encuentro crecidito el niño y sin cara de muerto, Desde luego de ser es un dibujo idealizado

- Pili Mo Esto es genial! Menudo tandem!!

- Pepe Moreno Álvarez Pepe Garrido Ortega Idealizado, seguro. Es una litografía de Cayetano Palmaroli, según pintura de Federico de Madrazo.

- Pepe Garrido Ortega Pepe Moreno Álvarez ansí sí

- Pili Mo Estoy sin palabras. Mil gracias, Pepe Garrido Ortega! Seguimos incondicionales!

- Pepe Garrido Ortega Pili Mo yo si qué soy incondicional tuyo

- Rafi Corpas Reyes Nos quedamos con la duda, la reina y él se lo llevaron a la tumba, ..o no.

- Pepe Moreno Álvarez Pepe Garrido Ortega Para rizar más el rizo. Como bien sabes a Martín Belda por los servicios prestados a la Corona, se le concedió el título de marqués de Cabra por su dedicación a la monarquía en el exilio. Una concesión dada por Alfonso XII, quién de su relación con la contralto, Elena Sanz, tuvo dos hijos, Alfonso y Fernando. El rizo viene porque Elena Sanz, al objeto de ennoblecer sus orígenes, presumió siempre de su tío ministro, el marqués Martín Belda, con el fin de no ser tan desacreditada por su relación con el hijo de Isabel II. Una relación con Belda que más que familiar era de amistad, por ser el egabrense amigo de sus padres.

- Rafi Corpas Reyes Pepe Moreno Álvarez,, más que amigo del padre de la cantante, Martín Belda podría tener algún parentesco con la familia de Elena Sanz,,..?..

- Pepe Garrido Ortega Rafi Corpas Reyes es complicado dar una respuesta categórica, aunque mañana daré más argumentos y que cada cual saque sus conclusiones. Por cierto, sobre este tema hablé con con don Francisco Belda y Anduaga, IV Marqués de Cabra, y coincidíamos bastante

- Pepe Garrido Ortega Uy uy uy sobre ese tema en mi libro hablé muchísimo, sobre las razones por las que XII, a propuesta de Cánovas, le dio el título de Marqués de Cabra. Y pienso hablar mañana. Aunque estás totalmente en lo cierto

- Pepe Moreno Álvarez Pepe Garrido Ortega Luego, ¿la influencia de Elena Sanz sobre Alfonso XII tuvo algo que ver en el ennoblecimiento de Belda?

- Pepe Garrido Ortega Pepe Moreno Álvarez en absoluto tuvo algo que ver Elena Sanz, la querida de Alfonso XII, para que éste concediera el título de marqués a Belda. Déjame Pepe que te conteste el LUNES (mañana descanso de estas historias que tengo abandonadas mis lecturas) más extensamente sobre este asunto, pues ello me permitirá hablar del trato íntimo que mantuvo Belda con la ex reina Isabel desde que se establecieron en París, y más tarde en Sevilla. Pero aviso para que no surjan falsas expectativas sobre posibles relaciones sexuales en los ya ancianos Isabel de Borbón, ex reina de España, y el marqués de Cabra.












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160113. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega. De historias de mi familia 13:

  Aquí una litografía en la que se recoge el sueño plácido del infante que nos ocupa, y que nos ha proporcionado Pepe Moreno Álvarez; aunque se trata de un dibujo idealizado, pues ese bebé regordete no parece que acabe de morir. A la derecha otra carta enviada por Belda a Moreno dos días después del frustrado parto de la Reina. Dice así:
  Madrid 13 de Julio de 1850
  Mi querido Frasquito:
  Todavía estoy malo de resultas del disgusto que tuve ayer en Palacio. Es una sincera desgracia la muerte del Príncipe, desgracia irreparable si la divina providencia no hace que la Reina conciba pronto, y sea más afortunada en el parto. Yo todavía creo que el médico ha matado al príncipe por haber hecho mal la operación, pero esto no es más que una opinión mía.
  Adjunta es la carta que me pides para [Miguel] Tenorio, la cual va firmada por una persona a quien no se puede negar. Arjonilla pertenece a la provincia de Jaén y Enciso es Gobernador de Málaga, por esta razón te remito la carta para Tenorio.
  Me parece bien lo que me dices sobre el potro de [Lorenzo] Calderón, y no lo compres si no te gusta.
  Adiós, queda tuyo.
  Martín
  Como vemos a Belda no se le pasaba el berrinche por la muerte del príncipe, y ello vino a reforzar mi hipótesis de principio de si aquella criatura, a la que se le dio por nombre Fernando, podía ser fruto de unas supuestas relaciones íntimas, digámoslo así, entre Isabel II y Martín Belda, dado que la actitud de nuestro paisano parecía más la de “un padre” dolido por la muerte de un hijo –“estoy malo de resultas del disgusto”, decía en esa carta- que la de un diputado al que se le había encargado que asistiera al parto en representación del Congreso. Pero debo aclarar desde ya, que aquellas presunciones mías tras leer estas cartas por primera vez llegué a rechazarlas por completo unos años después, cuando ya había estudiado a fondo el reinado de Isabel II. Así que fijo ahora mi análisis sobre aquellos acontecimientos, en varios puntos:
  1- Al iniciarse la legislatura a 30 de octubre de 1849, Belda fue designado por sus compañeros primer Secretario el Congreso, “el cargo más importante después del Presidente” (4-11-1849), se ufanaba con orgullo y algo de exageración en otra carta a su amigo Frasquito. El que ocupase ese cargo explica que acudiese al parto de la reina en representación del Congreso, por lo que rechacé los motivos que me llevaron a considerar inexplicable su asistencia si solamente era un simple diputado recién llegado al Congreso. Dicho de otra manera, la asistencia de Belda al parto de la Reina no obedecía a motivos extraparlamentarios. 2- Desde el otoño de 1847 hasta finales del 1849, la Reina Isabel disfrutó, dejémoslo ahí, de unas relaciones íntimas con el Marqués de Bedmar, don Manuel Antonio de Acuña y Dewite, que a su vez estaba casado con la rumana doña Lucía Palladi y Callimachi, princesa viuda de Cantucuzeno, y ahora Marquesa de Bedmar. Por tanto, si aplicamos la regla de los nueve meses, el Marqués de Bedmar debía ser el padre natural de la criatura que nos ocupa.
  3- Y como bien se dice que el mundo es un pañuelo, no me resigno a recordar aquí otro asunto colateral al que estamos tratando. Así, fracasado el matrimonio de los Bedmar, mientras el marqués residía en Madrid por su relación amorosa con Isabel II, su esposa vivía entre París, Nápoles o sus posesiones de Moldavia. Y hete aquí que, como decían los clásicos, estando la Bedmar en Nápoles conoció allí a un apuesto y jovencísimo cabreño. Efectivamente, en Nápoles conoció Lucía Palladi a Juanito Valera, que iniciaba por entonces su carrera en la diplomacia, gracias a que el embajador de España en aquel reino del sur de Italia era medio pariente suyo, el Duque de Rivas, que se lo había llevado de agregado a la legación. Total, la Palladi era mucho mayor que Valera, pero ello no fue obstáculo para que entre ambos surgiera una gran pasión amorosa. En fin, podía hablar muchísimo más de esta otra historia de amor, pero mejor lo dejo aquí que me pierdo. Una cossita nada más, la Palladi dejó a Valera, y bien que lo sufrió nuestro don Juan (nunca mejor aplicado el don). Por cierto, Valera de jovencito las prefería maduras, de mayor, jovencitas.
  4- Entre 1850 y 1855 el nuevo amante de Isabel II fue don José María Ruiz de Arana, hijo del Conde de Sevilla la Nueva, el cual, según Carmen Llorca (autora de una de las mejores biografías sobre Isabel II), fue el primer hombre que amó de verdad a aquella mujer desdichada por el marido que le habían otorgado por razones de Estado. Paquita llamaba la reina a su marido, don Francisco de Asís de Borbón, con el que si acaso tan solo una de sus hijas pudo ser fruto de la simiente de Paquita. Todas las demás hijas de la reina tuvieron diversos padres, incluido por supuesto, el príncipe que más tarde reinó con el título de Alfonso XII. Por lo que respecta a nuestra historia, a Ruiz de Arana no parece que le diera tiempo a engendrar a nuestro Infante.
  Retomando nuestro asunto. ¿Tuvo Valera algún trato con Isabel II con anterioridad a 1849? Seguramente sí, por aquello que contábamos del día en que la Reina se fijó en un Belda que le aplaudía a rabiar desde el patio de butacas del Teatro Real. Y tras este episodio ¿se pudo acostar algún día nuestro Martín, aunque solo fuese en una siesta, con la Reina? Pienso que no, pues anteriormente a Bedmar, doña Isabel II estaba muy ocupada atendiendo a un general, al que ella llamaba el General Bonito, nada menos que a don Francisco Serrano y Domínguez, al que luego hizo Duque de la Torre. Y curiosamente, en septiembre de 1868 los generales Serrano y Prim, junto al almirante Topete, encabezaron la revolución que derrocó a Isabel II y la mandó al exilio.
  Por último, de verdad, algo antes de que se publicara mi libro sobre Belda, tuve ocasión de hablar largo y tendido con don Francisco Belda y Anduaga, IV Marqués de Cabra, y ambos nos hicimos la misma pregunta mutuamente ¿Qué habría de cierto en esa historia trasmitida de unas generaciones a otras sobre una posible relación amorosa entre Isabel II y Martín Belda? Los dos, don Francisco Belda y yo, nos contestamos mutuamente lo mismo: en nuestra familia se contaba eso, pero ninguno de los dos habíamos encontrado pruebas escritas que lo atestiguase.
  Rafi Corpas Reyes
  Menos incógnitas sobre este asunto... Muchas gracias Pepe

- Manuel Gomez Camacho Magnífico relato Pepe, una buena retaila de amoríos de Isabel II y esas cartas un fiel testimonio de lo que ocurría en aquellos años en la Corte.

- Rafael Luna Leiva Superinteresante, Pepe Garrido Ortega

- Mari Sierra Luque Núñez Muy interesante!!!

- Carmen Garcia Valdecasas Muchas gracias Pepe ,por tu interesantísimo relato, donde con tanta claridad nos explicas aquellos tiempo tan especiales . Y las luces y sombras, que siempre habrá en la vida de todos y también en la Historia. Pues es realidad la Historia es un cúmulo de acciones , de hechos ,de en qué el más alto grado o menor grado todos formamos y construimos , según el nivel en que nos toca vivir y el momento. Muy agradecida siempre.

- Pepa Merino Leon Que bonito y que penita da de verlo pero intresantisima historia

- Mercedes Porras Alcantara Menudo putiferio tenian montado las damas

- Francisco Bonilla Laguna Magnifico relato.

- Juan Granados Jurado Y suma y sigue, ésta reina tubo mucha guasa Pepe, pero mucha, seguimos aprendiendo.

- Rafael López Valle Magnífico relato.Argumentos más que suficientes para una serie de Neflix de varias temporadas.La corte era un saco de cuernos y cada cual los sacaba por donde podia ji..ji

- Antonio Suárez Cabello COMO DIJO JUAN VALERA a su padre en una carta (Madrid, 30 de enero de 1847):”… las damas de buen tono dicen que no será extraño que Su Majestad hembra busque algún consuelo, y la disculpan para cuando lo haga, con la estúpida conducta de su marido”.

- Margarita Carrillo Muy interesante

- Loli Comino Bermudez Magníficos los relatos y cómo digo siempre...lo que se aprende en éste grupo!!. Gracias a todos los que aportáis

- Amparo Romero Marquez Tengo un artículo de un periódico antiguo, donde aparece la última entrevista que le hizo Benito Pérez Galdos a Isabel II durante su destierro en Francia.












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160114. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega:
  De historias de mi familia 14:
  ¿Tuvo algo que ver Elena Sanz para que Alfonso XII concediera el título de Marqués de Cabra a Martín Belda?
  Antes de ayer me hacían aquí esa pregunta Pepe Moreno Álvarez y Rafi Corpas Reyes. En absoluto les respondí. Elena Sanz, la querida de Alfonso XII, nada tuvo que ver para que este rey concediera el título de marqués a Belda. Aunque también les dije que me dieran tres días para justificar mi respuesta. Me gustó la pregunta, pues mi respuesta me permitiría hablar del trato íntimo mantenido por Belda con la ex reina Isabel, después de ser derrocada por la Revolución de Septiembre de 1868. Pero avisaba a quien esperara mis argumentos que en ningún caso se crearan falsas expectativas sobre posibles relaciones sexuales en los ya ancianos Isabel de Borbón y el marqués de Cabra. Paso a ello, tratando de sintetizar todo lo posible. Si alguien se ve atraído por este asunto puede recurrir a mi libro sobre Belda, donde trato detenidamente sobre la vida de Martín Belda en los últimos años de su vida.
  El 17 de septiembre de 1868, tras resonar en la Bahía de Cádiz veintiún cañonazos, los gaditanos se lanzaron a las calles al grito de “¡Viva España con honra!”. Al día siguiente la reina suspendía sus baños en Lequeitio y se trasladaba a San Sebastián para tratar con el Gobierno sobre la gravísima situación política en la que se encontraban, una vez que el movimiento revolucionario se había extendido por todo el país. Recordemos que Martín Belda formaba parte de ese Gobierno, como Ministro de Marina. Un inciso importante para nosotros, a lo largo del siglo XX, de las muchas ocasiones en que el ejército se sublevó contra el gobierno de turno, la Marina únicamente se sublevó en esta ocasión, dado el grave descontento extendido entre los jefes de la Marina por la política emprendida por Belda desde el ministerio. Pero este es otro cantar. Lo dejó ahí.
  A Belda le pilló la revolución en Madrid, y rápidamente marchó en un tren especial hacia San Sebastián a situarse junto a su reina, o más bien junto a la frontera. Desde allí envió a su viejo amigo Moreno su última carta antes de salir de España:

  San Sebastián 25 Septiembre (1868)
  Mi querido Frasquito:
  Aquí me tienes en el puesto que el honor me señala respetado por todo el mundo y celebrando mi conducta amigos y adversarios. Mis compañeros de Ministerio se fueron a Bayona, algo más deprisa de lo que les hubiera convenido.
  La Marina ha concebido una infame traición porque yo he hecho 60 millones de economía que le robaban y se tiraban. Ellos al cubrirse de ignominia han coronado mi obra. Ya hablaré y el país se asombrará.
  Creo que la situación es grave y que se triunfará. Dios lo quiera para que no toquemos en el caos.
  Hoy he recibido tu carta del 19 y nada puedo hacer de lo que me encargas porque ya no hay nada, pero no te apures por los fondos de la Iglesia que todo se pagará.
  Estoy muy inquieto por lo que haya ocurrido en esos pueblos y porque nada sé de Romualdo (su cuñado) y su hijo. Si sabes algo dímelo.
  Adiós mil afectos a Manuela y queda tuyo.
  Martín
  Tras varios días de levantamientos militares por todo el país, el día 28 de septiembre se produjo la famosa batalla del Puente de Alcolea, en el que las fuerzas sublevadas, capitaneadas por el general Serrano (recordemos, el General Bonito de la jovencita Isabel) vencieron a las fuerzas militares que todavía eran leales a la reina.
  El día 30, Isabel II, aceptando que todo estaba perdido, cruzó en ferrocarril la frontera con Francia por Irún. Con ella marchaban su esposo Francisco de Asís de Borbón, los infantes, algunos ministros, entre ellos Belda, y… su querido de turno, Carlos Marfiori. ¡Cómo cambiaban los tiempos! Ese mismo día se escribía en La Iberia de Madrid: “La bondadosa señora Isabel de Borbón, la nieta de Manuel Godoy, la mujer de entrañas de hiena, por la cual tanta y tanta sangre española se ha vertido, ha abandonado España”.
  Pretendía darle carpetazo hoy a este asunto de las relaciones de Martín Belda con Isabel de Borbón tras la Revolución del 68, pero por más que resumo, si quiero explicarme bien, me veo forzado a continuar mañana. Por cierto, mañana publicaré una carta de Belda, mandada a su amigo Frasquito desde Bayona, en la que comentaba lo ocurrido en Cabra y Doña Mencía tras la Revolución de Septiembre. Mientras tanto, como se decía en el Teatro Principal, visiten nuestro ambigú y preparen un buen cuenco de palomitas para mañana.

 Pepe Garrido Ortega El 17 de septiembre de 1868, tras resonar en la Bahía de Cádiz veintiún cañonazos, los gaditanos se lanzaron a las calles al grito de ¡Viva España con honra!

 Pepe Garrido Ortega El 17 de septiembre de 1868, tras resonar en la Bahía de Cádiz veintiún cañonazos, los gaditanos se lanzaron a las calles al grito de ¡Viva España con honra!

- Manuel Gomez Camacho Interesantísimas crónicas Pepe, nos tienes enganchadisimos a éstos intrigantes relatos amigo.

- Lola Jimenez Que interesante !!!

- Juan Granados Jurado Gracias Pepe por tu nueva entrega, como todas muy interesante.

- Juan Domingo Lopez Olivencia Gracias... las palomitas ya las tengo, ahora falta lo bueno... Jajaja

- Carmen Garcia Valdecasas Muchas gracias Pepe Garrido Ortega, por las cosas que nos cuentas ,de personas de tu familia y su relación con personas de Cabra como Martín Belda y Don Juan Valera .

- Rafi Corpas Reyes Muchas gracias Pepe, las cartas sí que evidencian la estrecha amistad entre ellos....

- Rosi Garcia Muy interesante, estamos a la espera!!

- Rosa Ordoñez Calvo Muy interesante!!!

- Rafael Luna Leiva No me voy del ambigú hasta la nueva entrega, Pepe Garrido Ortega

- Maria Lopez Interesante. Muchas gracias!!! Quedo a la espera de la nueva entrega!!!

- Francisco Bonilla Laguna Emocionante relato, ya impaciente por el siguiente,gracias.

- Lourdes Osuna Muchas gracias Pepe

- Pedro Cubero Pepe, hasta mañana.

- Manuel Escudero Tenía yo razón en lo de la novela por entregas … esto engancha más que Ama Rosa …

- Lola Pérez Aranda Muchas gracias por por tus noticias tan interesantes y curiosas

- Francisco Trillo Puede ser una imagen de texto

- Jose Maria Martinez Iniesta Muy interesante

- Martin Luque Ramirez Muy interesante hace dos años estubimos de visita en el Escorial y la guía no sabía nada de esta historia

- Pepe Garrido Ortega Amigo Martín es que no.se había leído mi libros de.Valera y Belda

- Mercedes Fernández López Pepe Garrido Ortega fuiste un gran profesor mío, pero si también me hubieras dado historia hubiera sido sensacional

- Pepe Garrido Ortega Y a mi también Mercedes Fernández López me hubiera gustado más dar Historia que Contabilidad

- Ana Maria Perez Castillo Estoy enganchada

- Juan Muñoz Arjona Qué interesante momento.

- Maria Dolores Meroño Roldán Interesantísimo, y muy bien explicado para hacerlo reducido. Gracias.












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160115. Cabra en el Recuerdo.-

  Pepe Garrido Ortega:
  De historias de mi familia 15:
  ¡Cuidado! El que avisa no es traidor. Esta retahíla me ha salido un poquito larga.
  Rememorando a Fray Luis de León cuando regresó del destierro a sus clase:
  Decíamos ayer…
  Los acontecimientos de tanta trascendencia como los de septiembre de 1868, a Belda, a quien muchos hacían responsable de la sublevación de la Marina, no le suscitó en su conciencia autocrítica alguna. En los primeros días tras la revolución escribió Valera a su mujer: “Vi a Belda, al pasar por San Sebastián. Estaba tan fresco” (12 de octubre de 1868). Al estupor y precaución por su vida y hacienda de un primer momento, siguió el sosiego y la tranquilidad interior al no sentirse culpable de nada. Desde Bayona, escribió a su amigo Morenito: “Ya observarás que nadie se ocupa de maltratarme. En la conciencia de todos está que he cumplido con mi deber y que mi conciencia está muy tranquila” (12-10-1868). Algunos días más tarde le reiteraba su tranquilidad de espíritu, a la vez que confortaba al amigo ante los “caramillos” (los chismes) propalados por sus enemigos políticos, no sorprendiéndose en demasía por los cambios políticos ocurridos en Cabra y Doña Mencía. Así consolaba a Moreno de los ataques que estaba recibiendo de algunos de sus paisanos:
  Bayona 20 Octubre (1868)
  Mi querido Frasquito:
  Acabo de recibir con el placer que puedes figurarte tu carta del 16 y no me admira lo que me dices de la situación de ese pueblo y de la conducta de los Priegos, Muñoces y Vergara pues ella corre pareja con lo que pasa en Cabra, donde los más absolutistas e inmorales como el célebre D. Paco [Alcalá y Lumbreras] pretenden ser los amos del cotarro en nombre de la libertad. Esto da asco y vale más no ocuparse de ellos.
  De sobra conocen esos señores que tú no has faltado a tus principios y que lo que has hecho siempre ha sido favorecer y servir a tu país con abnegación y patriotismo, pero como lo que quieren es mandar y que tú no mandes, por eso se levantan caramillos que sólo prevalecerán mientras dure el desorden y la confusión que reina en todas partes. Con las elecciones espero que te harán justicia y si no la obtienes no te apures que esto no puede seguir de ningún modo como está.
  Aquí continuaré hasta que haya seguridad individual. Nada tengo que temer por mi conducta. Amigos y adversarios me hacen justicia y respetan mi nombre. Con eso me contento, que en su día ya hablaré y se avergonzarán los traidores de su infame y villana conducta.
  Da mis cariños y afectos a Manuela y no dudes jamás que es tu mejor y más apdo. amigo
  M.

  En Cabra se había constituido una Junta Revolucionaria presidida por Mariano Méndez de San Julián (concuñado de Belda), y de vocales José María Coy, Inocente Montalvo, Rafael Mármol y Manuel Ortiz; de secretario José Nogueras. El 1 de enero de 1869 Mariano Méndez de San Julián fue nombrado Alcalde de Cabra, y de tenientes de alcalde Joaquín Fernández Tejéiro, Vicente Sancho Heredia y Miguel Gutiérrez Toro. Todos miembros de las familias más linajudas de Cabra, por lo que nos podemos hacer una idea de qué tuvo de revolucionaria en Cabra la Revolución del 68. Más bien se trataba de un quítate tú, que me pongo yo.
  Dos meses antes de celebrarse las primeras elecciones tras la revolución, escribió Martín Belda a Francisco Moreno dándole cuenta de su estado de ánimo ante las próximas elecciones:
  Bayona 31 Octubre (1868)
  Mi querido Frasquito:
  Con la satisfacción de siempre he recibido tu carta del 28. Veo por ella que estás bueno con Manuela que es lo principal, pues lo demás importa menos. Yo sigo regular porque en este tiempo y con la humedad constante de este país los dolorcillos reumáticos no dejan de molestarme.
  La situación de ese pueblo no deja de llamarme la atención, pues conozco lo poco que valen los que se han apoderado del mando, y que si tú quisieras pronto se irían con la música a otra parte, pero haces bien en dejarlos que se desacrediten y los echarán a pedradas.
  Creo que la elección de diputados no será por distritos, sino por provincias o grandes circunscripciones. Juan Valera será naturalmente apoyado por el Gobierno y tú harás muy bien en ayudarle porque algo hará por tu país. Yo no haré nada, nada en su favor, ni tampoco en contra y digo esto porque conmigo se ha considerado siempre mal. Toda mi vida le he estado haciendo favores y siempre me ha pagado con un par de coces. En esta situación ni aun siquiera ha sido para mandar un mal recado a mi casa. En fin, no le deseo ningún mal, pero no estoy dispuesto a dar el menor paso en su favor, ni a volverme a acordar jamás del santo de su nombre.
  Creo que si las Cortes están llamadas a resolver la forma de gobierno que haya de regir la nación, se cumplirán tus deseos porque los Reyes no se fabrican con la facilidad que los pucheros de Alcorcón. Habrá República y después lo que Dios quiera.
  Probablemente me iré a París dentro de 6 u 8 días hasta que haya orden y pueda regresar a España y a Cabra.
  Mil afectos a Manuela y a toda la familia y amigos y queda tuyo.
  Martín

  Como vemos en esa carta, Belda presuponía con fundamento que Valera se presentaría a las próximas elecciones por el distrito de Cabra. Valera estaba a bien con los que manejaban el cotarro de la nueva política; el Gobierno Provisional le había nombrado el 11 de octubre subsecretario de Estado a las órdenes del ministro Álvarez Lorenzana. El mismo Belda, en esa carta, daba libertad a Moreno para que apoyara a Valera en las elecciones, si ese era su deseo, dado que él no pensaba presentarse; aunque como veremos cambió de opinión.
  Tras las relativas buenas relaciones entre Belda y Valera durante la etapa de aquel de ministro de Marina, renacía ahora la desconfianza que siempre existió entre ambos personajes. Si cuando Valera se había visto apurado, mientras Belda gozaba de las mieles del poder, se quejaba de que Martín nunca había hecho nada por él, a pesar de lo que le debía a su familia –decía–, ahora que era Belda quien pasaba por sus peores momentos, éste se quejaba amargamente de la ingratitud de don Juan: “Toda mi vida le he estado haciendo favores y siempre me ha pagado con un par de coces”. La disparidad de caracteres de uno y otro hizo que nunca llegaran a entenderse, y si a ello añadimos el que ambos optaran a la vez por el distrito electoral de Cabra en diferentes ocasiones, no es de extrañarse de esa mutua antipatía existente entre ambos paisanos. Ahora llegarían a enfrentarse, una vez más, en unas elecciones, pues al final Belda decidió presentarse.
  También llegaba ahora la ruptura política entre Belda y Moreno. La indestructible alianza mantenida por ambos desde que en 1847 Belda alcanzó por primera vez un acta de diputado se vino abajo cuando ya no se podían intercambiar votos por “turrón”. Moreno y tantos otros se pasaron al bando del hombre fuerte de ahora, Juan Valera, aun cuando éste reconocía la dificultad del momento para conseguir “turrones”. Escribía Valera en una carta a Moreno:
  “Lo cierto es que ahora es más que nunca difícil conseguir credenciales. No es una facción o una agrupación política la que manda, ni siquiera un gran partido solo, sino tres grandes partidos juntos, sin contar los intrusos, y entre estos tres grandes partidos, uno, el democrático que, por lo mismo que jamás había probado el turrón, viene más hambriento y con más ansia de comerle” (Madrid, 25 de octubre de 1868).
  Por entonces Moreno ya trabajaba para Valera, según le reconocía éste en la misma carta: “Sé por mi madre cuanto usted está haciendo ahí en mi favor y se lo agradezco en el alma”, a la vez que le pedía consejo a tan experimentado político sobre la forma de encarar la campaña: “Dígame las personas a las que usted crea conveniente que yo me dirija”. En otra carta le aconsejaba Valera a Moreno que limpiara su pasado beldista:
  “Es menester que trabaje usted bien en Baena, sin inspirar recelos de que los quiera usted mandar, sino haciéndose el humilde. León y Medina, gran farsante, le escribirá a usted pidiéndole favor para su yerno. Contéstele usted con buenas palabras, a fin de que no le tiren a usted a degüello poniéndole de beldista” (Madrid, 20 de noviembre de 1868).
  Por otro lado, Valera continuaba con su visión particular de la política, una visión idealizada, tan alejada de la Belda, todo un político profesional. Tremendas y significativas palabras lanzaba Valera sobre sus paisanos:
  “Yo haré siempre lo que sea consecuente y decoroso, y si los paisanos me piden cosas feas e indignas no las haré, y si no me votan, que no me voten. Sin que me hayan votado jamás he vivido y he llegado a ser algo en el mundo y espero no oscurecerme ni perderme entre las turbas porque hoy me nieguen lo que siempre me han negado, ya con uno, ya con otro pretexto. En mí se cumple el refrán de que nadie es profeta en su tierra. Aseguro a usted que me pesa el haberme presentado por ahí; pero ya es tarde para volverme atrás. Seguiré aunque saque media docena de votos (Madrid, 30 de noviembre de 1868).
  Belda era el político apestado del momento, al que le colgaban todos los sambenitos, nadie deseaba que se le relacionara con él. Hasta el mismo Valera sufría ataques como antiguo beldista, aunque bien sabemos que no lo fue nunca:
  “Los Alcalá-Zamoras siguen tachándome de beldista y reaccionario, y, lo que es más odioso, creo que mi primo Frasquito Ulloa está con ellos. Mucho tengo que agradecer a Doña Mencía y muchos desengaños tengo que lamentar de Cabra y sobre todo de mis parientes” (Valera a Moreno: Madrid, 25 de diciembre de 1968). Belda dudó hasta el final si presentarse o no a las elecciones, al verse cada día más abandonado por sus antiguos partidarios. Días antes de las votaciones parecía resignado ante su previsible fracaso, a la vez que insistía en su honestidad:
  Bayona 8 de enero (1869)
  Mi querido Frasquito:
  Contesto a tu carta del 2 que acabo de recibir para decirte que el mismo día que te anuncié iba a escribir a Romualdo[Méndez de San Julián] para que desistiera de mi candidatura lo hice, pero él ha creído contar con elementos bastantes para quedar con lucimiento, ya que no se vence y sigue en su trabajo. Por mi parte no he escrito a nadie, dejo en libertad a todo el mundo y no formaré queja de que no me voten los amigos. Conozco las circunstancias y respeto la posición de todos.
  No tengo nada que temer de mis enemigos en cuanto se refiere a mi honor y a mi conducta como hombre público, como funcionario y como Ministro. Desafío a todo el mundo a que se ocupe de mí y puedes estar seguro de que si ya no lo han hecho es porque mis antecedentes son como el cristal. Pienso escribir de la marina con la energía y la prudencia que el negocio exige, y en cuanto a que se ocupen de mi vida privada déjalos que ya lo pensarán y si lo hacen no podrán decir nada que lastime mi honor. ¡Ah!, si yo no estuviera tan limpio ya lo habrían hecho.
  En esta ocasión la provincia de Córdoba se dividió en dos únicos distritos, el de la capital y el de Montilla, en el que se integraba el de Cabra. Por el distrito de Montilla obtuvieron el acta de diputados: Luis Alcalá-Zamora Caracuel, José Alcalá-Zamora Franco, Juan Valera Alcalá Galiano, y José Álvarez de Sotomayor. Los candidatos moderados –Belda, Mariano Méndez de San Julián, Juan de la Corte Ruano– y los republicanos –Leiva Muñoz, Ángel de Torres– se quedaron sin representación. Valera sacó 25.521 votos, Belda 926.
  Belda tuvo que sentirse muy dolido ante la deserción de los incondicionales de antes. Sobre todo, de los más allegados, como su viejo amigo Frasquito, con el que rompió prácticamente sus relaciones. Tras este único fracaso de Belda en su tierra desde que se presentó por primera vez en 1847, prácticamente, finaliza la relación epistolar que conservamos en mi familia de cartas de Martín Belda a mi bisabuelo: son un total de 401 cartas, más un centenar más de cartas de otros remitentes dirigidas a Belda o a Moreno, y que entre ellos dos se intercambiaban. Hay una última carta de Belda -Marqués de Cabra ya- a mi bisabuelo fechada en Sevilla a 16 de abril de 1877. En ella se tratan de algunos negocios que por entonces se traían entre manos, y que carece de transcendencia política, aunque por su contenido se deduce que los viejos amigos se habían reconciliado.

- Manuel Escudero Los entresijos de la política … la de antes y la de ahora. Gracias por compartir tan interesante historia.

- Rafael Luna Leiva La retahíla se me ha hecho corta. Buena redacción y muy amena. Enhorabuena , Pepe Garrido Ortega

- Maria Dolores Meroño Roldán Gracias por esta ibteresante historia, pero la política, como siempre.

- Carmen Garcia Valdecasas Es interesantísimo todo lo que nos has comentado. Además con un material de ese tipo familiar,completamente documentado de primera mano. Como se movían los hilos de la política, como se cambiaba de bando. Como se medraba de ella,..... En muchos aspectos es lo que vemos a lo largo de toda la Historia. Me ha encantado tu forma de exponerlo y de ilustrado. Eres un extraordinario comunicador, muy ameno todo ,nos has tenido enganchado y expectantes. Además a mi me ha venido fenomenal para comprender aún mejor el libro que sabes estoy leyendo,y que me aclara muchas cosas.Nunca me podía imaginar que Francisco Moreno Ruiz fuera " Morenito". También alguna relación con antepasados que no tenía ni idea. En fin es para estar largo tiempo comentando muchas cosas . Siempre te agradeceré tus aportaciones y todo las informaciones . Muchas gracias.

- Juan Domingo Lopez Olivencia Y se repite, y repite la Historia. Siempre igual. Qué asco de políticos!!!

- Rafi Corpas Reyes Muy bien expuesto Pepe,.. Belda se sincera con su amigo Morenito,, pena qué los ideales acaben con la amistad, pero siempre ha sido así y seguirá siendo.. Muchas gracias

- Manuel Escudero Rafi Corpas Reyes : siempre así; en la familia de mi mujer, la política separó a dos buenos amigos y se crearon dos bandos en Priego, los Nicetistas y los Valverdistas.

- Pepe Garrido Ortega Sí Manolo, celebres las trifulcas entre nicetistas y valverdistas. Como aquella que con motivo de la primera visita de don Niceto a Priego como Presidente de la República los valveristas compraron casi todas las entradas de la corrida que le ofrecieron en la plaza de toros para que cuando entrara don Niceto en la plaza los tendidos estuvieran casi vacíos. Me contaba mi padre que la Guardia Civil tuvo que recoger gentes con camiones para meterlos en la plaza casi a empujones antes de que comenzara la corrida

- Manuel Escudero Rafi Corpas Reyes así es y así me lo contaron … y más anécdotas de esas. Pero es una pena que por la política se pierdan amistades de niño.

- Pepe Garrido Ortega
  Muchas gracias, Carmen García Valdecasas, por tus palabras, y a todos los demás por vuestros comentarios o por decirme que os gustan los míos. Entro todos me dais fuerzas para proseguir estas historias que me llevan su tiempo, pues no todo es coser y cantar. Tengo que consultar mis libros sobre Belda y Valera, mis notas tomadas en diversos archivos, buscar cartas que no he vuelto a leer en desde hace tiempo pero que cuando leí por primera vez ya me llamaron sumamente la atención… Como esa en la que Valera llega a decirle a su amigo Morenito que él “nunca fue profeta en su tiempo” ¡Cuánto me hizo pensar! O aquella otra en que decía a su mujer que “los cabritos se las dan de cultos, cuando no han dejado de ser rústicos y villanos”. Por cierto, cuando publiqué por primera vez esos comentarios de Valera y otros semejantes sobre sus paisanos, en un periódico local y en aquel fabuloso Foro del Lagarto ¡que tiempos aquellos! Hubo algunos insignes valeristas, yo no lo soy, que se molestaron no sé sí más con Valera o conmigo. En fin, lo mismo hablo, si os parece bien, y aunque me salga de lo de historias de mi familia, sobre la opinión que tenía Valera sobre los de “su lugar”, sobre los de Cabra y Doña Mencía.

- Manuel Escudero Pepe Garrido Ortega por supuesto, cuenta, cuenta … Aunque creo que a Valera le tiraba más Doña Mencía que Cabra, donde nació “casi de casualidad”.

- Pepe Garrido Ortega Uy que fallo, donde digo que Valera decía que él “nunca fue profeta en su tiempo”, quería decir que él afirmaba que "nunca fue profeta en su PUEBLO".

- Pepe Moreno Álvarez La intrahistoria ayuda a comprender mejor tanto la Historia como a sus personajes.

- Pepe Garrido Ortega Así es Pepe Moreno Álvarez la intrahistoria del pasado se recogía bien las cartas que se escribían unos a otros. Ya no se escriben cartas, los historiadores del futuro tendrán que recurrir a los mensajes que se envían los políticos de hoy por sus móviles, que en algún lugar, seguro, estarán archivando la cía y compañía. Cuantos escándalos no han surgido de la publicación en la prensa de mensajes de móvil, y lo que te rondaré morena.

- Pepe Garrido Ortega Claro que las cartas de entonces no llegaban nunca al gran público y la inmensa mayoría desaparecieron con el tiempo. Por eso para cualquier historiador es un privilegio acceder a colecciones de cartas guardadas de generación en generación, como ocurrió en mi familia con las de Valera y Belda.

- Pepe Moreno Álvarez Gracias a aquellos que guardaron sus archivos familiares y permiten conocerlos, nuestro conocimiento es más rico. Gracias Pepe Garrido Ortega

- Manuel Gomez Camacho Muchas gracias Pepe por compartir aquellos entresijos de la política del siglo XIX

- Juan Granados Jurado Al final nos damos cuenta del mundo de la política, siempre igual, el trasfondo es el mismo, cambian los tiempos pero la finalidad es la misma, gracias Pepe por este comentario que es interesante y extenso.

- Miguel Angel Lubian Gracias Pepe Garrido por esta interesante historia. Como se movían los hilos de la política, antes como ahora es una pena qué los ideales acaben con la amistad y dividan a las familias. Muchas gracias.

- Jose Maria Martinez Iniesta Gran trabajo.

- Pepe Garrido Ortega Sinceramente, me sorprenden un poquito tantos comentarios sobre que los políticos se criticasen o se pisasen entre ellos par alcanzar el poder, los de antes y los de ahora. ¿Es que no ocurre lo mismo en el mundo de la empresa o de los negocios? O entre los periodistas, artistas y famosillos, entre cuñados, suegras y demás, hasta entre los mismo amigos o familiares etc. etc. No es algo exclusivo de la política, es algo consustancial a la condición humana. Que cada cual se examine así mismo y vea si alguna vez ha hablado en privado mal de algún jefe, compañero o compañera de trabajo, o vecino del quinto etc etc. Y que si estaría dispuesto a que cualquiera pudiera leer sus mensajes de Wassap o sus conversaciones por el movil, ejem ejem o las fotos que se intercambia con... Es que con en esas correspondencias entre Belda, Valera, Morenito y Cía estamos accediendo a unos documentos excepcionales, privados, privadísimos, que no estaban destinados al conocimiento público. Y precisamente por eso después de siglo y medio son tan importantes para conocer la historia de lo que se traían entre manos. No eran ni mejores, ni peores que nosotros. La historia nunca se puede analizar con la visión del presente, que ese es otro tema.

- Pepe Moreno Álvarez Analizar la Historia en su contexto y en su tiempo, no con los preceptos presentes, que es lo que se está haciendo desde muchos ámbitos y muchas orillas para beneficio propio y con fines muy concretos.

- Rosi Garcia Me encantan éstas historias!!

- Lola Pérez Aranda Me encanta todo lo que escribes

- Rosa Ordoñez Calvo Muy interesante, y políticamente hablando, " como siempre". Muchas gracias.

- Francisco Bonilla Laguna Curioso e interesante relato, gracias por compartir.

- Rafael López Valle "En política no hay amigos, no hay más que complices". Interesantes relatos y muy bien descritos.., muchas gracias Pepe Garrido

- Tiburcio Benitez Roldan Muy interesantes tus relatos. Gracias amigo Pepe.












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160116. Cabra en el Recuerdo.

  Pepe Garrido Ortega:

  Historias de mi familia 16: Hablaba el otro día de lo rumboso que era con sus nietos mi abuelo Cristóbal Ortega. Pues bien, no era menos rumbosa su mujer, mi abuela Paca Merino. A mi abuela le gustaba mucho recibir visitas en su casa, por lo que las tertulias allí eran permanentes de la mañana a la noche, en invierno en el comedor y en verano en el patio central. A los nietos pequeños nos engatusaba para ir a visitarla regalándonos UNA peseta casa día que íbamos a verla, Así que yo, que debía ser un niño con deseos de hacerse rico proto 😃 iba todos los días a darle un besito en mi camino al Paseo. Pero un día en que fui a verla con un amigo, al despedirnos de ella nos dio UNA peseta a cada uno. Claro, cuando se corrió la voz entre mis amigos de aquel derroche de mi abuela, todos, todos querían ir a visitarla conmigo. Yo tuve que poner orden y dije, sin amontonarse que es peor, cada día vendrá uno conmigo. Y así lo hicimos en adelante. Pero ocurrió que un día durante nuestra visita empezó en Radio Atalaya el rosario que se rezaba en directo todos los días, y el cual no se perdía mi abuela por nada. Aquellos rosarios cada día los rezaba en la radio un cursillista de cristiandad (una asociación católica de mucho auge en los años 60s a la que pertenecían mis tíos Pepe, Juan y Manolo) y una locutora de la misma radio (seguro que Carmina Alcázar se acordará muy bien de esto). Pues bien, aquel día en que nos pilló el rosario durante la visita, mi amigo de turno y yo, acompañamos en los rezos a mi abuela y a los de la radio hasta el final del rosario. Con sus jaculatorias y todo. Y al despedirnos ¡toma ya! mi abuela nos dio DOS pesetas a cada uno. Con lo cual nos dijimos todos, tenemos que ir a la hora del rosario. Bien, pero la verdad es que se nos hacía un poquito pesadito tanta avemaría y tanto ora pro nobis. Así que, listos nosotros, o seducidos por el demonio que siempre está enredando, acordamos que como el rosario comenzaba a la seis de la tarde teníamos que llegar a casa de mi abuela a la seis y cuarto para que no tuviéramos que tragarnos, con perdón, el rosario completo. Y así lo hicimos. Pero ¿qué ocurrió? Que el primer día en que pusimos en marcha aquella estratagema semirosariana, al despedirnos con un besito a mi abuela nos dijo: “¡Anda! tomad una peseta para cada uno y vais que chuta”. Como ocurre tantas veces, la avaricia rompió el saco. Y aprendimos que mi añorada abuela Paca Merino sería una mujer cariñosa, encantadora, generosa, y muy beata ella, pero no tonta.

  A la izquierda mi abuela y a la derecha la vemos, ya muy mayor, junto a sus hijos María y Juan, su yerno Pedro Gómez de Aranda y su nieto Rafael Ortega Aranda.

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega, de tu abuela tengo recuerdos similares, pues siendo monaguillo de la Soledad, al verla entrar cada día, mis amigos y yo nos peleábamos por llevarle el correspondiente reclinatorio, pues ello suponía ganarnos una propina poco común.

- Maria Dolores Meroño Roldán Qué hermosos recuerdos

- Antonio Luque Ramírez D. Pedro Gómez de Aranda, gran persona. A él le debo mi afición al Quijote. En clase de Lenguaje en el Taller-Escuela, nos hablaba con entusiasmo de la obra de Cervantes. Los chiquillos de entonces especulábamos con la matrícula de su motocicleta Triumph, SS, si sería servicio secreto. A escape libre era ensordecedor el ruido que producía.

- Carmen Garcia Valdecasas Encantadores recuerdos de la niñez y sus pequeñas pillerias. Ahora tengo un lío porque conocí allí la familia Merino ,también eran muchos hijos ,imagino de tu familia también . Muchas gracias Pepe Garrido Ortega por compartir estas vivencias que nos hacen recordar tantas personas tan extraordinarias y cosas de allí.

- Pepe Garrido Ortega Carmen Garcia Valdecasas esos Merino a que te refieres que vivían en la calle Álamos eran mis primos pero por parte paterna, su padre Vicente Merino estaba casado con Carmen Garrido, hermana de mi padre. Tanto mi abuela como ese Vicente Merino procedían de Nueva Carteya en donde había muchos Merino, no sé si también parientes entre ellos

- Carmen Garcia Valdecasas Pepe Garrido Ortega muchas gracias. Si vivían en la Calle Álamos. Es que no me acordaba ahora era del segundo apellido era Garrido Ahora lo veo claro. Gracias

- Juan Granados Jurado Es evidente que la abuela no era tonta Pepe, sabía que erais unos pillines jajaja!!!.

- Rosi Garcia Que graciosa, la historia del rosario, las abuelas, no tenían un pelo de tontas!!

- Manuel Escudero Toma ya! Rafalín de jovencito … y con pelo negro … 😜 Foto tengo de él con su hermano Juan, en una procesión porque hicimos juntos la Primera Comunión los dos hermanos y mi hermano José Carlos y yo. Que no se ofenda por lo del pelo porque yo también lo tengo blanco … y bastante menos que él

- Francisco Bonilla Laguna Una narración que creo será aplicable a muchos de nosotros.

- Pepe Garrido Ortega Perdonad, que me inmiscuya otra vez en la conversación. Es que acabo de recordar una de aquellas ocurrencias que se le ocurrían a mi abuela. El caso es que en Cabra había un señor al que llamaban Pepe el del Correo y que era de esos que tenían la costumbre de golpearte en el pecho con la mano continuamente mientras mantuviera una conversación contigo. Por eso mi abuela cuando se hablaba de mujeres que habían tenido muchos novios o varios maridos ella siempre decía: "Pues a mí solamente me ha palpado mi marido y Pepe el del Correo"

- Maria Victoria Garrido Ortega Pepe , que historia de familia más bonita!!

- Lola Pérez Aranda onitas. Fotos. Tu tía mi cuñada P A

- M Carmen Cañero Ruiz Buenas noches,, buenísimo, relató y muy bien por ,la abuela,,una señora muy justa, sí, llegaban,amedio, rosario, justo es , media Propina,,, vosotros,, pensabais que,medio rosario vale una, peseta Felicidades por su relató,señor Garrido, Ortega, saludos

- Maria Del Carmen Mari-Carmen Serrano Una señora maravillosa y generosa y con un sentido del humor, conozco a alguien que en varias ocaciones mandó que le trajeran una cabra de Juan de escama,

- Loly Jimenez Rafael Ortega(el niño de la foto me dió matemáticas en BUP en nocturno

- Pepa Chacon Una familia en cantadora .

- Pepa Chacon Toda la familia eran y son guapísimas y guapísimos.

- Margarita Carrillo Entrañables recuerdos

  












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

Nº 160117. Cabra en el Recuerdo.

  Pepe Garrido Ortega: Historias de mi familia 17:

  De izquierda a derecha vemos a Manolo Mora Mazorriaga, Cristóbal Ortega Priego, Domingo Solís Ruiz y Tomás Ortega García (farmacéutico de Nueva Carteya). Esta fotografía tiene su historia, a la que en parte alude mi abuelo Cristóbal en lo que escribió al dorso de la misma fotografía. Recomiendo que leáis lo que escribió mi abuelo antes de seguir con mis explicaciones.

  Por lo que habéis leído veréis que mi abuelo no se llevaba muy bien con la normas ortográficas. Para quien tenga dificultad para su lectura transcribo, tal cual, el contenido. Dice así:

  “Este retrato seiso en el banquete que sedio el dia que pusieron los mojones del termino de Nueva Carteya el día mas felis de mi vida. Cristobal” Por tanto, esta foto “seiso” [no quiero rectificar a mi abuelo] el día en que los carteyanos consiguieron una antigua aspiración: que les dieran el término, esto es, que se independizaran de Baena al constituirse Nueva Carteya como municipio independiente. Lo que supuso para mi abuelo, según nos confiesa él: el día mas felís de su bida.

  Mi abuelo Cristóbal nació en Nueva Carteya, en el seno de una familia de pequeños agricultores. Con lo cual, lo propio de la época, a la escuela fue poco tiempo y bien joven se puso a trabajar en el campo junto a su padre y sus hermanos. De natural inteligencia destacada, las pequeñas tierras heredadas de sus padres, con trabajo, tesón e inteligencia natural, además de su buen trato con las gentes, hizo que pronto empezara a destacar como agricultor, logrando poco a poco ir ampliando sus tierras. Con el tiempo se hizo uno de los mayores propietarios olivareros de Carteya. Desempeñó la alcaldía de Nueva Carteya y, como ya conté en otra ocasión, con motivo de unos graves altercados producidos en su localidad por la subida del pan un real se enfadó con su paisanos y les dijo eso de: "Ahí os quedáis, me voy a Cabra". En torno a 1920 compró la antigua casa de los Alcalá Galiano de la calle Almaraz esquina con Pepita Jiménez, en donde vivió el resto de su vida, con su esposa Paca Merino Merino, y sus siete retoños: Enriqueta, Antonio, María, Eugenia, Paca, Juan y Cristóbal. Al fallecer, en torno a 1960, dejó a cada uno de sus hijos un considerable patrimonio en tierras de labor, principalmente tierras de olivar radicadas en Nueva Carteya, Cabra y Castro del Río.

  Mis recuerdos de él son escasos, los propios de un niño de ocho años cuando él murió, y de los que ya hablé. Pero por lo que siempre escuché en mi familia y entre personas ajenas que lo trataron fue un hombre muy querido. Mi padre adoraba a su suegro por su inteligencia -decía-, su don de gentes, su naturalidad y sencillez, su vista para los negocios.... su sentido del humor.

  Y a propósito de su sentido del humor, voy a narrar una anécdota que le ocurrió y que en Cabra fue muy comentada. Se cuenta que un día fue al Banco Español de Crédito para retirar una importante cantidad de dinero. Así que abrió su talonario de cheques y su pluma y comenzó a escribir... Cuando le advirtió el cajero del banco:

  - Don Cristóbal que “beinte mil” se escribe con uve.

  Respondiéndole él rápido y veloz:

  - Venga, ponlos tú, a ver si te los dan.

  Pepe Calvo en su último libro, “La España Austera. Del fin del racionamiento a la muerte de Franco”, entre las páginas 228 a 230, recoge con detalle esa anécdota para ilustrar al lector sobre la falta de formación académica de bastantes de los grandes agricultores de la posguerra. Lógicamente alterando el nombre de protagonista, mutando el don Cristóbal real por un imaginario don Fernando. 

- Rafael Luna Leiva Pepe Garrido Ortega, este libro es el que te quedaba por escribir 😉😉. Sencillamente genial!!

- Manuel Escudero Los que no pudieron ir a la escuela por tener que ponerse a trabajar … Si hubieran ido, no veas lo que hubieran dado de sí, … mucho más aún.

- Paco Roldan Urbano Muy bien detallado amigo Pepe.

- Pepe Garrido Ortega Sobre los olivos que le dejó mi abuelo a sus hijos a su muerte, surgió una historia que no me resisto a dejar de contar. Comentaba el otro día que algunos de mis tíos fueron mucho de aquello que se llamó Cursillistas de Cristiandad: https://es.wikipedia.org/wiki/Cursillos_de_Cristiandad Los Cursillistas se reunían con frecuencia para orar conjuntamente en la iglesia, para retiros y ejercicios espirituales, y cosas por el estilo. Pues bien, un día en una de aquellas reuniones le tocó a mi tío Juan, muy cursillista él, lanzar a sus “hermanos en Cristo” la charla de meditaciones del día. Y en la cual venía utilizando continuamente la expresiones “hermanos”, “mis queridos hermanos en Cristo”, “nos debemos ayudar como hermanos”, “cuando uno de nuestros hermanos sufre tenemos que acudir todos en su ayuda” etc. etc. Y tanto utilizaba la expresión de “hermanos” que uno de los presentes no se pudo contener y exclamó: ¡Ay, hermano Juan, que mal nos repartió los olivos papa!

- Lourdes Osuna Pepe Garrido Ortega Me encanta!!!!

- M Carmen Cañero Ruiz Buenos días,señor,muy interesante lo dé Los cursillos ,pero creo, qué ésos cursillos, sí lo fueran dedicado a enseñar atantas personas, que no sabían ni poner su nombre, creó que,nuestro Señor abría estado, más, contento,y perdoné qué, sea la Nota discordante,le pido, perdón,soy una de las que trabajar desde, los 9años, apenas, puede ir al colegio se , Nota por mis faltas dé ortografía,lo que, sé lo aprendí,gracias alos libros, qué, leía, cuando iba a trabajar en él Metro de Barcelona,le pido perdón un saludo dé una qué tubo que dejar, Cabrá

- Pepe Garrido Ortega M Carmen Cañero Ruiz muchas gracias Carmen por seguir mis comentarios. ¿Cómo me vas a pedir disculpas a mí por alguna falta de ortografía? Fíjate en mi abuelo, a quien tanto quería yo, y que tampoco pudo ir mucho a la escuela. Lo que no hizo que no fuera un gran hombre, como seguro que tú también eres una gran mujer, aunque tampoco pudieras ir mucho a la escuela. A mí, M Carmen Cañero Ruiz me has demostrado sobradamente aquí en Cabra en el recuerdo que eres una gran mujer. Muchísimas gracias por aportarnos tu visión sobre Cabra y sus gentes, Lo cual yo te lo agradezco mucho. Me interesa conocer tu opinión sobre cualquier cosa de la que hablemos. Saludos, Carmen. Ah, y no me llames mas de usted. Si sigues haciéndolo me tendré que enfadar y empezaré a llamarte doña Carmen

- M Carmen Cañero Ruiz Buenas tardes José, muchas gracias por tus palabras,me cuesta tuteate pero sí así lo quieres, lo haré,,,,soy de la, vieja, educación ,me cuesta, tutear,, Ya que soy más vieja,quel junquillo,ja ja ja,,buenas tardes,un saludo, con mucho, afecto

- M Carmen Cañero Ruiz El GIF puede contener I Love You, gracias, Thank You y Te Quiero

- Maria Victoria Garrido Ortega Todavía he tenido que recordar algo aquí en Baena...preciosa foto y mejor todavía el comentario de el abuelo.

- Alicia Osuna Oteros Genial relato. Creo que tu abuelo era familia de mi abuela Paca

- Pepe Garrido Ortega Gracias. Sí, creo que sí eran parientes

- Alicia Osuna Oteros Creo además que eran los padrinos de mi madre. Un saludo

- Inés Espejo Cubero Me encantan tus relatos..

- Carmen Garcia Valdecasas Muchas gracias Pepe Garrido Ortega por todo lo que nos cuentas de tu familia porque en ella está también parte de la Historia de aquella época que un poco vivimos también en ella. De esa separación de Nueva Carteya de Baena, de esa intrahistoria de familia ,de ese latir,de esa lucha diaria en fin todo lo que cuentas ... Como tu bien nos dices con esa cercanía, claridad ,simpatía,.....con que tu sabes comunicar, recuerdo esos Cursillos de Cristiandad de oírlo comentar. De la fotografía recuerdo a Don Manuel Mora Mazorriaga,quizás a Domingo Solís Ruiz ,los demás no te puedo decir. Muchas gracias de nuevo por tu generosidad, vas sembrando inquietudes por saber cada día más de nuestra Historia sólo por comprender más el esfuerzo de los que nos precedieron y saber apreciar mejor todo lo que nos dieron .

- Pepe Garrido Ortega Carmen Garcia Valdecasas muchas gracias. Precisamente eso es lo que más me interesa de estas historias, más que contar la historia de mi familia, contar la intrahistoria, como bien dices, de Cabra. Acercar a las nuevas generaciones a cómo se vivía y se pensaba por entonces. Bien entendido que cada familia, cada egabrense, vivía según sus circunstancias (que diría Ortega, mi primo no, el Gasset 🤣) Por eso me interesa dejar muy claro que yo hablo de mi experiencia, que es de lo que puedo hablar. Y sé que cada cual vivía conforme a "sus circunstancias", repito. No siempre tan de color de rosa como las de mi infancia, por desgracia. Confío en que se me entienda bien. No pretendo pontificar de nada y menos que se piense que todos vivíamos con las mismas inquietudes, las mismas facilidades o las misma dificultades. Siempre trato de escribir con el máximo respeto a todos mis paisanas y paisanos.

- Paquita Vera Jimenez Me encantan leer sus relatos .

- Marisa Muñoz Jimenez Me encanta leeros pero solo me queda una cosa clara que mis padres se fueron del pueblo por falta de trabajo y a mi me dejaron sin mis raices y todavia despes de casi setenta años no lo acabo de asimilar llevare hasta mi muerte esae desarraigo

- Manuel Gomez Camacho La finca que heredó tu madre era la de las Vegas en Nueva Carteya, Pepe Garrido Ortega

- Pepe Garrido Ortega Manuel Gomez Camacho exacto, parte de Las Vegas. Y a mí luego me tocó un trocito 😃 Una onceava parte de lo de mi madre

- Juan Granados Jurado Buen relato éste, cómo todos los que nos cuentas, gracias Pepe.

- Rafael López Valle Miremos en esta publicación que nada dan regalado, un buen hombre trabajador del campo y con muchas faltas de ' ortografía", que es lo de menos.., para ser buen empresario y enrollado con todos no hace falta ser un Séneca. Formalida, trabajo, y un buen sentido profesional es suficiente para abrirse camino

- Marisa Muñoz Jimenez Rafael López Valle gente como esa es la que nos hace falta en esta tierra que aprendan de la universidad de la vida y el trabajo que don los auténticos maestros

- Rafael López Valle Marisa Muñoz Jimenez exacto, Marisa

- Ana Espinosa Me gusta mucho leerte, Pepe. Revivo historias que para mí son familiares, iba de muy pequeña a casa de tu abuela Paca y atisbo recuerdos preciosos de su cariño. Gracias.

- Pepe Garrido Ortega Ana Espinosa sí, sí, sí. Además estuve muy bien suspendido y mi padre animó a tu madre que muy apurada le dijo a mis padres que no había tenido más remedio que suspenderme

  












Historias de mi familia. Monografíco de Pepe Garrido Ortega

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